dormir con los ojos abiertos y soñar sin haberme dormido

soñé con gente que estaba y gente que se iba, con un abrazo que no me era correspondido -pero sí me era permitido, qué crueldad-, y con que me quedaba sola en una casa porque todos tenían que irse y quería salir afuera -valga la redundancia- aunque estaba en una ciudad que no conocía -y quería que alguien me llevara pero no quería esperar- y no sabía cómo hacer para recorrerla sin perderme.
igual salía, preguntaba y no sabía a dónde estaba cada cosa que me decían. era una ciudad gris pero casi como una maqueta, lloviznaba y era casi nochecita. un policía me indicaba que el lugar que yo buscaba -un lugar para ver una película- estaba cerca de una calle, que yo tampoco conocia y entonces no sabía para dónde buscar, y para qué me había servido preguntar si tampoco podía hacer nada con la respuesta que me habían dado.

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