la otra noche soñé que lo iba a ver a adrian, pero antes de llamarlo me encontraba con la gordita del aparicio y ella me llevaba a su casa que se estaba armando ahí.
entraba a su casa, era como una casita subterránea debajo del pabellón b, techo bajo pero acogedora. me hacía pasar, las habitaciones estaban una tras otra.
nos sentábamos a la mesa, pero entonces -eran las 9 y media de la noche- me daba cuenta que era muy tarde, que ya tenía que irlo a buscar a adrian porque si no se iba a complicar para quedarme.
afuera estaba oscuro y era peligroso -no por mi, sabía que él se iba a preocupar si andaba sola por ahi a esas horas- y entonces lo agarraba al colombiano blanco -ese que tiene dos esposas- para que me acompañara.
salíamos a la cancha y él lo empezaba a llamar "adrian!!", pero él no respondía ni salía a la ventana, y dentro del bloque empezaban a repetir el llamado "adrian, adrian!". yo gritaba también -qué raro una voz de mujer gritando acá- "adrian!", y su nombre sonaba por todo el lugar una y otra vez.
pero él no respondía. decidíamos entrar. por la puerta había dos escaleras y yo no recordaba cuál subíamos siempre con él. íbamos uno por cada una pero la mía doblaba a la izquierda -aeropuerto shopping...- y se terminaba.
volvía para probar la otra y entonces lo veía, de espaldas, yendo hacia la puerta.
corría hacia él y le saltaba encima, me colgaba de su cuello. él me veía, se sonreía y me decía, vamos vamos, hay que anotarte. y yo pensaba, no será tarde? pero siempre se puede hacer algo para arreglar. y caminábamos de la mano hacia la oficina de los delegados.
después le conté que había soñado con él, que cada noche sueño con él -y que recién había notado que su nombre aparece en todos mis últimos posts-.
y me dijo, pucha que estás obsesionada con este chango! y yo me reí, pero entonces agregó, no, eso no es obsesión, eso es amor.
lunes, noviembre 24, 2008
la vida es un picnic
martes, noviembre 18, 2008
todos se casan en primavera
estas noches vengo soñando con mucha intensidad.
el sábado a la tardecita caí y en mis sueños atravesábamos un shopping montados en un carrito de supermercado. era toda una aventura. en una parte había escaleras mecánicas apagadas pero muy empinadas; bajar iba a ser peligroso, pero lo hacíamos. era el shopping-aeropuerto de mis sueños, con muchos desniveles y calidez interior. afuera llovía, creo, y al salir era de noche.
después esa noche que soñé que estaba en la casa de la abuela y sacaba de la bañera su andador mientras pensaba, cuando yo sea vieja no voy a necesitar andador porque lo voy a tener a adrian para apoyarme en él al caminar. y él a mi.
una noche soñé que nos acurrucábamos en el último vagón del tren al lado del último asiento a la derecha. los asientos siempre son iguales si son de tren, de micro o de avión, asi que no recuerdo si despegábamos o si el tren era rojo y se desplazaba entre árboles verdes verdes. y temíamos que nos encontraran mientras yo pensaba, qué rápido ha pasado todo, qué de repente he tenido que dejar mi vida atrás.
y qué pasará ahora.
miércoles, noviembre 12, 2008
días difíciles
anteanoche soñé que adrian estaba con su amiguita y cuando yo le hablaba me ignoraba. luego le conté y me dijo "estás celosa?". y yo le dije que no.
anoche casi no dormí, en esa cama de piedra -literalmente- y sin almohada, pero sobreviví -y tampoco estuvo tan mal...-
esta mañana recuperándome soñé que venía mamá a cochabamba y discutíamos, obviamente, y yo la agarraba de la solapa y la ponía contra la pared y le decía que no se meta. que no se le ocurra. y al despertar de mi siesta encontraba que los dueños habían venido a ocupar la casa y habían mejorado las cerraduras -igual iban mis llaves- y estaban haciendo una fiesta -panchos-. unos niños jugaban con pistolas de agua y me mojaban, pero era agradable porque hacía calor, y había una capa de agua de como 3 centímetros sobre el pasto. yo chapoteaba feliz.
ay estas esperas...
jueves, noviembre 06, 2008
giros
anteanoche y anoche soñé intenso y una vez la realidad y el sueño se mezclaron y por un momento quien estaba a mi lado en la realidad era quien estaba en mi sueño y eso fue extraño. pero fue bueno despertar en la calidez de la realidad.
supongo que mis sueños están siendo muy personales, papá, mamá, la tía, ariel y ezequiel aparecen una y otra vez. anteanoche estábamos en cocha y papá y mamá llegaban pero se hacían los sotas cuando queria presentarles a adrian. anoche estaba en buenos aires y corría para que mamá no me alcanzara con un abrigo que quería darme -hacía fresco pero yo estaba bien con mi shortcito, y además no quería aceptarle nada- y luego paraba colectivos en la avenida pero ninguno me llevaba -por qué cuernos no me paran?- y corriendo corriendo estaba analía y un chango y le daba a ese chango algo que tenía que darle y él me decía que yo era muy distinta que la foto y que jamás me hubiera reconocido. analía también estaba distinta.
antes en un atardecer corríamos por j.b.justo con ariel adelante y los autos se detenían porque habían atropellado a alguien -de toda la gente, por qué iba a ser justo la tía?- yo retrocedía -lo sabía- y veía su falda y sabía que era ella. sus ojos abiertos pero no, no podés morirte, tenés que darme lo que me prometiste. ella parpadeaba, la llevábamos a la casa. se mejoraba muy rápido.
todo olía a verano.